Bulimia sexual - Febrero 2021
La adicción al sexo es peor que una tortura. Los que bromean diciendo que desean tener este problema, desconocen totalmente las graves consecuencias que comporta el padecerla.
Un equipo de psicólogos y psiquiatras de la Universidad de California han considerado esta adicción como un trastorno de salud mental que evidencia un desorden hipersexual.
Algunos expertos consideran que esta adicción describe un tipo de conducta inadaptada y compulsiva, en cambio hay otros muchos psiquiatras que no ven el comportamiento compulsivo como una adicción.
Los adictos recrean una serie de fantasías sexuales y recurren a la actividad sexual en respuesta a estados de ánimo desagradables como el estrés, ansiedad o depresión, también puede darse en personas que padecen TOC, TDAH, abusos, maltratos, personalidades inmaduras….
La necesidad de aumentar progresivamente la frecuencia de actividades sexuales les hace recurrir a la pornografía, cibersexo, trabajadoras sexuales, masturbación y encuentros sexuales anónimos. En definitiva, son personas para las que el supuesto placer que experimentan de forma puntual es una manera de descargar tensión.
Esta adicción interfiere en la vida diaria tanto a nivel personal y social como profesional. Aunque en un principio la ansiedad se intenta mitigar con la búsqueda del placer, el problema surge cuando después de conseguirlo se vuelven a encontrar de nuevo en el punto inicial y eso les impulsa a repetirlo de nuevo para evitar esa sensación de abstinencia que les crea desesperanza y vacío.
Con la tecnología se ha facilitado y extendido más esta conducta.
Es importante tener claro que la agresión sexual y la violación son conductas de dominación y violentas, que nada tienen que ver con el sexo. También quiero que tengan claro que hay gente que al ser descubierta siendo infiel o teniendo ciertos comportamientos sexuales no legales, ha manifestado ser adicta al sexo para evitar una condena mayor, sin estar realmente afectada por esta adicción.
Los que padecen esta enfermedad no suelen publicarlo y al perder o tambaleárseles la vida, van en busca de ayuda.
Asociaciones y centros de ayuda a los cuales pueden dirigirse:
Películas que reflejan lo qué ocurre cuándo no puedes frenar tus deseos sexuales:
Cyber Seduction: His Secret Life (2005)
Shame: Deseos culpables (2011)
Thanks for Sharing (2012)
Un atrevido Don Juan (2013)
Perversa adicción (2014)
No quiero terminar sin aclarar que una persona puede tener una vida sexual muy activa durante toda su vida, y no por ello se debe catalogar como una adicción.
Podéis descargaros el artículo aquí:
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